La barbacoa de carbón es un elemento imprescindible para cualquiera que tenga un jardín y le guste la carne jugosa y asada. Estas barbacoas pueden dar a tu comida el más increíble sabor ahumado y además son ligeras y pequeñas, lo que facilita su almacenamiento. Sin embargo, el precio que pagas por tener una carne tan sabrosa viene después en forma de acumulación de suciedad y de un colector de cenizas lleno hasta los topes.
Así que, si:
tienes grasa acumulada en tu parrilla de carbón;
buscas una forma natural y ecológica de limpiar tu barbacoa;
quieres aprender a mantener tu barbacoa limpia durante más tiempo.
¡Sigue leyendo!
Antes de empezar a limpiar el aparato, asegúrate de equiparte con los siguientes elementos para conseguir los mejores resultados posibles:
Una hoja de nylon
Guantes de goma
Cepillo de parrilla o cualquier otro tipo de cepillo de cerdas duras
Un recipiente grande lleno de agua jabonosa (no es obligatorio)
Esponja
Paño de microfibra
Espátula de plástico
Cómo limpiar una barbacoa de carbón
Si nunca has limpiado tu barbacoa de carbón, prepárate, porque las cosas se ensuciarán literalmente. Primero…
Encuentra un lugar adecuado para la limpieza de la barbacoa
Elige una zona de tu jardín alejada de los senderos o caminos de entrada. Limpiarás mucha carbonilla y ceniza incrustada, y no querrás que caiga sobre ninguna zona de paso. Además, coloca una sábana de nylon debajo de la barbacoa, para proteger el suelo durante la limpieza.
Limpia el exterior de la tapa
Utiliza agua jabonosa caliente y una esponja para eliminar el polvo y la suciedad. Después, seca el exterior de la tapa con un paño de microfibra.
Encender la parrilla
Los restos quemados se carbonizarán al calentarse. Si alguna vez te has preguntado cómo limpiar una barbacoa de carbón fácilmente, es esto. Enciende tu parrilla como lo harías normalmente y pon la tapa. Esto permitirá que el calor haga que los restos de comida y las salpicaduras se sequen y no se engrasen.
Limpia la tapa por dentro
Espera a que la tapa se enfríe un poco y raspa la grasa carbonizada con la espátula de plástico. Después, utiliza el cepillo de la parrilla para eliminar los trozos finos de carbón y termina lavando con agua tibia y jabón.
Limpiar las rejillas de la parrilla
Retira las rejillas. Sumérgelas en el recipiente lleno de agua jabonosa y frótalas con el cepillo de la parrilla. Esto ayudará a ablandar la sucia acumulación. Eso sí, el recipiente de agua no es obligatorio. También puedes limpiar las rejillas mientras están dentro de la barbacoa
Limpia el recipiente
De nuevo, con tu espátula, raspa los restos de grasa que hayan quedado. Después, coge el cepillo de la parrilla y limpia los restos.
Limpia el contenedor de cenizas
Cualquier modelo de parrilla de carbón tiene un contenedor de este tipo donde se almacenan las cenizas. Una acumulación excesiva de ceniza puede obstruir las rejillas de ventilación de la parrilla y dificultar el control de la temperatura al cocinar.
No es necesario utilizar productos químicos agresivos cuando basta con pasar un trapo con agua tibia y jabón. Los detergentes químicos pueden dejar un residuo, que puede afectar al sabor y al olor de los alimentos la próxima vez que utilices el aparato.
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Cómo mantener una barbacoa de carbón
No necesitas hacer nada a la barbacoa cuando no la uses. No se ensuciará por sí sola. Sin embargo, tienes que saber cómo limpiar tu barbacoa de carbón después de cada uso. He aquí cómo hacerlo:
Vacía el recogedor de cenizas – No tienes que esperar a que esté lleno para tirarlo.
Limpia las rejillas – Precalienta la parrilla y cepíllala con un cepillo para parrillas. Si no tienes uno a tu disposición, utiliza una bola hecha de papel de aluminio. Puedes sujetar esta bola con las pinzas de cocina, en lugar de ensuciarte las manos.
Engrasa las rejillas – El aceite evita que los alimentos se peguen a la parrilla. Empapa un trapo limpio con el aceite que elijas y frota las rejillas con cuidado. El aceite no debe gotear en las brasas, así que no satures demasiado el trapo y no presiones demasiado fuerte.
Qué hacer cuando se acaba la temporada de asado
Una vez terminada la temporada, debes tomar medidas para que tu barbacoa de carbón esté lista para el año que viene. Te lo agradecerás después, cuando empiece la nueva temporada.
Vacía la barbacoa de cenizas.
Lava las rejillas, el recipiente y la tapa.
Engrasa las rejillas de cocción. Ya sabes que el aceite hace que la superficie no se pegue, pero también protege las rejillas de la oxidación.
Cubre toda la parrilla de carbón con una funda impermeable. Si tienes un garaje, aún mejor. Coloca la barbacoa dentro.
Resumen
Calienta la barbacoa de carbón para carbonizar los restos de comida. Esto hará que sean más fáciles de limpiar;
Limpia las rejillas en un depósito de agua lleno de detergente suave;
Limpia siempre las rejillas de la parrilla de carbón después de cada uso;
Trata siempre la parrilla al final de la temporada, para que esté lista para su uso posterior;
Cubre las rejillas de la parrilla con aceite para protegerlas.
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¿Tienes algún otro consejo para limpiar la barbacoa? ¡Háznoslo saber comentando abajo!
