Cómo limpiar un horno con vapor

limpieza a vapor de un horno

La limpieza a vapor de un horno es una de las formas más eficaces de eliminar la comida quemada y la grasa. Al fin y al cabo, ¿quién no quiere cocinar en un horno reluciente?

Pero aprender a limpiar un horno con vapor es algo totalmente distinto. Aunque se considera la forma más fácil y segura de limpiar tu horno, la limpieza a vapor puede hacerse de muchas maneras. Por no hablar de los cientos de productos de limpieza que puedes elegir.

Desde utilizar la función de limpieza a vapor de tu horno hasta colocar un recipiente con vinagre y subir el fuego, vamos a repasar las mejores y más eficaces formas de eliminar los malos olores, el humo y los restos de comida.

Entonces, si:

  • Te acabas de mudar y el horno necesita una buena limpieza;
  • Has comprado una cocina nueva y quieres mantenerla reluciente;
  • O tu vieja y fiel cocina necesita una limpieza a fondo.

Entonces, sigue leyendo.

Cómo utilizar la opción de limpieza a vapor que tiene tu horno

Probablemente una de las formas más sencillas de limpiar tu horno con vapor es activar la función de limpieza con vapor. Muchos de los modelos más nuevos la tienen. En los hornos SMEG, también puedes encontrarla como ajuste de «Limpieza por vapor».

Para asegurarte de que obtendrás los mejores resultados con la opción de limpieza a vapor, asegúrate de leer el manual que acompaña a tu aparato y seguir las instrucciones. Aquí tienes una guía paso a paso sobre cómo utilizar la opción de limpieza a vapor en la mayoría de los hornos:

  1. Retira todas las piezas internas del horno, como las rejillas y la lámina. Déjalas en remojo mientras se ejecuta el ciclo de limpieza a vapor, y luego límpialas a mano.
  2. Vierte un poco de agua en un recipiente apto para el horno y colócalo dentro del aparato.
  3. Activa el interruptor de autolimpieza. Dependiendo del horno, la cocción al vapor puede durar de 30 minutos a 3 horas. Consulta las instrucciones del fabricante.
    • No te preocupes si ves humo. Los hornos autovaciantes están diseñados para alcanzar temperaturas muy altas para chamuscar la grasa y la suciedad.
  4. Deja que el horno se enfríe y utiliza un paño húmedo para limpiar los restos y las cenizas.
  5. Limpia el exterior de tu horno. Esta parte no se verá afectada por la limpieza a vapor. Utiliza un paño húmedo y el detergente que prefieras para eliminar la suciedad.

Consejo profesional: Para que el horno tenga un aroma agradable y fresco, añade unas rodajas de limón en el recipiente de agua.

Utilizar un limpiador de vapor para limpiar el horno

Los limpiadores de vapor son herramientas excelentes para limpiar la suciedad pegada y los residuos. Por suerte, puedes utilizarlos en tu horno. Francamente, es un proceso bastante sencillo. Sigue estos tres sencillos pasos y devuelve el brillo original a tu horno.

  1. Trabajo de preparación: Deja pasar un tiempo para que tu limpiador de vapor se caliente. Mientras tanto, puedes preparar tu horno para la limpieza. Vacía el horno de todas las rejillas y del papel de aluminio. Utiliza un paño húmedo para eliminar cualquier resto suelto.
  2. Limpia con vapor: Comienza por la parte interior del horno y avanza hacia la parte delantera. Deja que la parte interior se remueva mientras trabajas en la puerta del horno abierta. Una vez que hayas limpiado la puerta con vapor, pásale un paño limpio.
  3. Repite el proceso: Vuelve a repasar el interior de tu horno con el limpiador de vapor, siguiendo con un paño limpio y limpiando la grasa derretida y los restos que hayan quedado. Para las manchas más resistentes, mantén el limpiador de vapor unos segundos más antes de pasar el paño.
Consejo profesional: Si hace tiempo que no limpias el horno, rocía el interior con vinagre blanco. Ayudará a deshacer la acumulación de grasa. También puedes añadir una solución de agua/vinagre a tu limpiador de vapor.

Limpiar el horno a vapor con vinagre, agua y bicarbonato de sodio

El vinagre blanco y el bicarbonato de sodio son remedios caseros probados desde hace tiempo para conseguir una limpieza brillante. Fáciles de conseguir, estos ingredientes tienen la capacidad de acabar con las bacterias y los olores procedentes de la comida quemada. A continuación te explicamos cómo limpiar un horno con vapor con vinagre y bicarbonato:

  1. Retira las rejillas del horno y déjalas en remojo en agua caliente con jabón. Aspira o limpia los restos sueltos del interior. Vuelve a colocar una de las rejillas en el centro del horno.
  2. Precalienta el horno a una temperatura alta. Mientras tanto, mezcla cantidades iguales de vinagre y agua.
  3. Coloca la solución en el horno y déjala durante más de 20 minutos, pero no más de una hora.
  4. Apaga el calorDeja que el aparato se enfríe y limpia los residuos con un paño limpio y seco.

Si el horno no se ha limpiado en un tiempo y está visiblemente en mal estado, continúa con los siguientes pasos:

  1. Haz una pasta de limpieza combinando 120 ml (4 oz) de vinagre, 150 ml (5 oz) de agua y 2 cucharadas de bicarbonato de sodio.
  2. Aplica la pasta sobre una esponja y frota las manchas que queden.
  3. Aclara la esponja y limpia el horno. Por último, seca con un paño suave.

Limpiar el horno con vapor de amoníaco

Descargo de responsabilidad: El amoníaco se considera una solución de limpieza industrial. Dicho esto, aunque puede ser eficaz en la limpieza de hornos, también puede ser peligroso. La mayoría de los sitios web no explican el peligro que supone el amoníaco, como las quemaduras en la piel, la irritación de los ojos y, si se mezcla con productos químicos que tienen lejía, puede producir un gas mortal.

Otra forma de limpiar el horno sin utilizar productos químicos tóxicos es la limpieza con vapor de amoníaco. El amoníaco es barato y fácil de encontrar, y aunque después de la limpieza a vapor con amoníaco pueden quedar algunas manchas pegadas, no habrá nada que un poco de grasa de codo no pueda eliminar.

Aquí se explica cómo limpiar un horno con vapor usando amoníaco:

  1. Precalienta tu horno a 200 grados y apágalo.
  2. Llena un bol apto para el horno con 1 taza de amoníaco y colócalo en la rejilla superior. Llena otro bol con agua hirviendo y ponlo en la rejilla inferior.
  3. Cierra el horno y deja que los vapores hagan su magia. Déjalo toda la noche o durante 8-12 horas; abre las ventanas para que haya una buena ventilación.
  4. Al día siguiente, limpia con un paño húmedo o una esponja.

Recuerda: Sigue siempre las instrucciones del reverso del producto. No mezcles amoníaco con lejía o detergentes que contengan lejía.

¿Te preguntas cómo limpiar el horno con vapor?

Resumen

  • La limpieza a vapor es un método estupendo para conseguir un horno impecable y libre de grasa sin necesidad de utilizar productos químicos.
  • Algunos hornos tienen una opción de autovaporización o utilizan un limpiador de vapor.
  • Puedes utilizar soluciones caseras para la limpieza a vapor como el vinagre, el bicarbonato de sodio y el amoníaco (pero ten cuidado con este último).
  • Los hornos con una larga acumulación de grasa y suciedad pueden requerir ayuda profesional.

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Publicado por
Araceli Molina

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