De hecho, los científicos han demostrado que la sensación acogedora que tienes cuando duermes bajo las sábanas en una habitación fría no sólo es agradable, sino que también es beneficiosa para el metabolismo y la pérdida de peso, puede ayudar a reducir la inflamación crónica y el dolor y favorece la regulación hormonal. He aquí por qué deberías intentar dormir siempre en una habitación fría.
1. Dormirás más y mejor
La regulación de la temperatura desempeña un papel increíblemente importante en nuestro sueño, ya que nuestra temperatura desciende de forma natural a la hora de dormir. Se trata de un proceso biológico necesario que forma parte de los ritmos circadianos que regulan nuestro sueño, nuestro horario de comidas y nuestros niveles de energía. Y aunque este descenso natural de la temperatura corporal funciona bien en la mayoría de las personas, una temperatura ambiente fresca, pero no gélida, puede facilitar este proceso y ayudarte a conciliar el sueño más rápidamente.
La gama de temperaturas recomendada está entre 60 y 67°F (15-19°C). Una temperatura ambiente fresca es especialmente beneficiosa para las personas cuyo ritmo circadiano está alterado (como es el caso de algunos insomnes), ya que empuja a tu cuerpo en la dirección correcta incluso cuando no te sientes especialmente somnoliento.
2. Las temperaturas frías pueden ayudarte a tener un sueño reparador
Se sabe que la producción de melatonina es máxima cuando una persona está en un entorno oscuro y fresco, lo cual es bueno, ya que la melatonina hace muchas cosas útiles para nuestro cuerpo. Por un lado, la melatonina es un potente antioxidante, por lo que te hará envejecer más lentamente y ser menos propenso a las enfermedades crónicas.
Como ventaja, la melatonina también regula las células grasas del cuerpo, así que asegúrate de dormir en una habitación oscura y fría si tu objetivo es mantener la belleza.
3. El dolor y la inflamación disminuyen con el frío
Si alguna vez has aplicado una compresa fría sobre una herida inflamada y has visto cómo mejoraba, habrás observado de primera mano los efectos antiinflamatorios del frío. De hecho, el dolor provocado por la inflamación puede ser la razón principal por la que tienes problemas para dormir, así que enfriando literalmente las cosas, podrás matar dos pájaros de un tiro y mejorar tus síntomas y dormir mejor simultáneamente.
4. Tu metabolismo se beneficia de las temperaturas más frescas, y también tu cintura
Sensibilidad a la insulina es un marcador clave que mide lo bien que nuestro cuerpo regula el azúcar en sangre, y ser más sensible a la insulina significa que tienes menos riesgo de padecer síndrome metabólico y diabetes. Un aumento de grasa pardaa su vez, también es un marcador beneficioso, ya que la grasa marrón es el tipo de grasa que nuestro cuerpo utilizará, a diferencia de la grasa blanca, que simplemente se acumula en nuestro cuerpo.
De este modo, dormir en una habitación fría puede ayudarte a prevenir la diabetes y el síndrome metabólico, y mantendrá tu cintura a raya.